HOY ME TOCAN LOS HUEVOS o “A RIO REVUELTO…”

Como bien dice el refrán ‘a río revuelto, ganancia de pescadores’, en cualquier negocio hay que aprovecharse de las circunstancias sociales que nos rodean para retocar los precios de todos los productos en general sin distinción de tipo de negocio con el argumento que sea. Ahora con la invasión de Ucrania, el alza de los precios de la energía, todo dios se sube al carro de la subida de precios, sin compasión ni remordimiento.

Y al hilo de lo escrito, relataré un hecho que nos ocurrió en una importante cadena de supermercados bien conocida: Estando de compras ayer, mi X y yo como empujador del carro de la compra, se me sugiere que me acerque a la sección de huevos para coger una docena de la clase XL (los gordos) y obediente –no puede ser de otra manera- tomo de la gran caja que los contiene, la susodicha docena categoría XL y noto con sorpresa que los huevos bailan mucho en su envase, es decir, que a los huevos les viene grande el hueco en los que están colocados. ¡Vaya! Con detenimiento observo que el envase es el de siempre pero el huevo es muy pequeño, por supuesto de XL nada de nada, si acaso del calibre M.

Como no me puedo callar ni bajo el agua, solicito a un empleado que por allí pasa, me informe quién es el encargado general del ‘super’. Amablemente me indica que el solicitado es el señor que atiende a una familia precisamente cerca del expositor de los mentados huevos. Allá que me voy y me sitúo a dos pasos del conclave para que se me vea bien. Me detecta en seguida y me atiende raudo preguntando qué deseo: “Quiero huevos gordos, es decir, XL” y él muy atento, me mira los que llevo en la mano, lee la etiqueta y me dice que son esos, “mire usted, aquí dice XL”, no señor, respondo, “si quiere usted hacer la comparación con los de categoría M, verá que son iguales”. Viendo que el hombre se está perdiendo en disquisiciones absurdas, sin responsabilidad en el asunto pues él habrá ordenado colocar la entrada de los huevos en el lugar del lineal que ocupan. Para joder un poco más, le indico que no solo no corresponden al tamaño XL, sino que han subido de precio 0,26€. El hombre está entre la espada y la pared, aunque mantiene estoico el tipo, dejo los huevos en su sitio, le digo que hable con el distribuidor y amablemente me despido de él. Para qué enredar más si esta circunstancia es conocida desde la gallina al Director General de Estrategias empresariales.

Esto que ya parece el final, no lo es. Explico por qué: Como nos hemos marchado sin los huevos y algún producto más que deseamos comprar en el otro supermercado, principal competencia del ya citado, nos pasamos decididamente por este centro y nos dirigimos directamente a ver los huevos que tiene. Sin esperarlo y sin anestesia, aquí encontramos la explicación del por qué los huevos XL han encogido tanto sin que lo hayan hecho los ojetes de las gallinas. Vemos en el envase de los huevos –los gordos, los XL- que la categoría de los tan mareados huevos es L/XL. ¡Oh, grandes mentes pensantes! Qué bien han resuelto el tema del calibre de manera que estos mini-huevos ahora están entre la L y la XL, que no es así, pero son más fáciles de tragar. Y el precio también ha subido 0,25€.

Como estos cuentos tienen muchas variantes, espero que sean otros los que elijan cualquier producto para examinar cómo nos toman el pelo sin compasión. No creo que los huevos vengan de Ucrania o Rusia y el transporte en grandes tráiler de cualquier punto de España hasta los centros de distribución, por muy caro que sea el gasoil, la repercusión del coste por cajita de docena de huevos podría ser de un céntimo, así que…

Ya voy a cortar el rollo pero antes quiero significar que hay muchísimos productos que han subido poquito pero han disminuido el peso del producto hasta en un 30 %. ¿Alguien quiere hacer cuentas?

Desde Las Flores a 8 de septiembre de 2022